CARTA A DIOS
“Eclesiastés 7:14 Reina-Valera 1960 (RVR1960)
14 En el día del bien goza del bien; y en el día de la adversidad considera. Dios hizo tanto lo uno como lo otro, a fin de que el hombre nada halle después de él.”
En este momento mis palabras van dirigidas hacia ti mi Dios, como todos los días, pero ahora públicamente:
No
me cansaré nunca nunca de agradecerte por mi vida y la vida y salud de las
personas que quiero y amo con toda mi alma.
Quiero
darte gracias padre celestial porque lo que he vivido me ha hecho feliz y también
me ha hecho aprender cosas que nadie me enseñó, te doy gracias porque por muy
duras que sean las pruebas de la vida, es voluntad de cada quien permitir moldearnos
por tu presencia mi Señor.
Hoy
estoy aquí, para exaltarte y adorarte, porque Tú eres y has sido mi único sustento espiritual cuando lo he
necesitado y estoy plenamente segura que siempre estarás a mi lado, porque yo
lo deseo así.
Tal
parece que las personas en el mundo no han podido entender, que todo puede
cambiar siempre y cuando tengamos la disposición de hacerlo.
Yo
soy un fiel testimonio de tu presencia en mi vida, porque deseé cambiar muchas
cosas con las que no me sentía bien, y aun deseo cambiar otras cosas que son
fundamentales para mi vida.
Porque
sé que aunque exista en la tierra la ignorancia, la incredulidad y la crítica,
con Tu presencia padre, me bastará para seguir adelante.
Porque
tribulaciones tengo en mi corazón y en lo profundo de mi alma, y aunque decida
perdonar a quienes me han ofendido, cada paso de lucha me cuesta cada día al
levantarme, pero Tú eres misericordioso hermoso Dios, porque puedo alabarte y
sentir que estas a mi lado en todo momento, y que con la prueba Tú me enseñas a
ser mejor persona cada día, a desearle a
mis hermanos lo mejor que Tu les puedas dar.
“Juan 16:33 Reina-Valera 1960 (RVR1960)
33 Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el
mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.”
Porque
hoy te hablo en público? Porque quiero manifestar tu presencia en mí, y
poder decir que no hay poder humano que pueda dañarme; porque yo no lo recibo,
porque así como Tú me conoces, mis verdaderos hermanos, amigos y quienes me
rodean, saben verdaderamente quien fui, quien soy y quien seré; porque en tu Nombre
me has hecho triunfadora.
Aunque
no posea cosas materiales, aunque no posea una vida igual a la de muchos; estoy
feliz porque tengo mi propia vida, de la que a veces me lamento y de la que a
veces no cambiaría por nada y agradezco; pero hoy me has enseñado a través de
mis experiencias de vida, que puedo guiar a través de tu sabiduría a una niña
hermosa que hasta el día de hoy me has regalado con su presencia en mi vida, por
lo que te pido me hagas ser una mejor madre cada día y te pido sabiduría para
recibir en bendición y en silencio, lo que me darás por fe; y será el tiempo
perfecto para vivir mi vida en la tranquilidad que siempre he deseado
vivir; porque las personas que tendré a mi lado vivirán en la misma paz, ellas harán
parte de mi familia.
Las
pruebas pasaran en mi vida como la palabra que me regalaste y me
profesaste una vez, y que yo la recibí
para mí:
“Job 11:13-19 Reina-Valera 1995 (RVR1995)
13 »Si tú dispones tu corazón,
y tiendes hacia Dios las manos;
14 si alguna iniquidad hay en tus manos, pero la apartas de ti,
y no consientes que en tu casa more la injusticia,
15 entonces levantarás tu rostro limpio de mancha,
serás fuerte y nada temerás.
16 Olvidarás tu miseria,
o te acordarás de ella como de aguas que pasaron.
17 La vida te será más clara que el mediodía;
aunque oscurezca, será como la mañana.
18 Tendrás confianza, porque hay esperanza;
mirarás alrededor y dormirás seguro.
19 Te acostarás y no habrá quien te espante;
y muchos suplicarán tu favor.”
y tiendes hacia Dios las manos;
14 si alguna iniquidad hay en tus manos, pero la apartas de ti,
y no consientes que en tu casa more la injusticia,
15 entonces levantarás tu rostro limpio de mancha,
serás fuerte y nada temerás.
16 Olvidarás tu miseria,
o te acordarás de ella como de aguas que pasaron.
17 La vida te será más clara que el mediodía;
aunque oscurezca, será como la mañana.
18 Tendrás confianza, porque hay esperanza;
mirarás alrededor y dormirás seguro.
19 Te acostarás y no habrá quien te espante;
y muchos suplicarán tu favor.”
Aunque
muchas personas opinen que nadie es la persona correcta para aconsejar, dar testimonios,
cambiar y expresarse; quiero más que nada recordar, que todas las personas
hemos cometido errores, y cada quien sabe los suyos; el problema radica en que
muchos no los reconocen ni son capaces de verlos; sencillamente se creen tan auto-suficientes en la vida, como para permitirse que el día que no existan más
en el mundo, nadie los extrañe.
No solo confiemos nuestra vida a Dios, escuchemos lo que de nosotros sale y miremos nuestros actos, probablemente podemos saber si le agradaremos a Dios, Nunca será demasiado tarde para mejorar y cambiar, no a la perfección, pero si desde nuestro corazón.
“Juan
8:7 Reina-Valera 1960 (RVR1960)
7 Y como insistieran en
preguntarle, se enderezó y les dijo: El que de vosotros esté sin pecado sea el
primero en arrojar la piedra contra ella.”
“2 Corintios 12:9 Reina-Valera 1960 (RVR1960)
9 Y me ha dicho: Bástate mi gracia;
porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me
gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de
Cristo.”
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